¿Será llamado un «nazareno»?
Por Dr. Nicholas J. Schaser
Según el Evangelio de Mateo, Jesús «cuando llegó, vivió en una ciudad llamada Nazaret, para que se cumpliera lo que fue dicho por medio de los profetas: “El será llamado nazareno”» (Mateo 2:23). Aquí está el problema: en ninguna parte los profetas dicen que el Mesías (o cualquier otra persona) «será llamado nazareno». La declaración simplemente no aparece en las Escrituras de Israel. ¿Mateo está equivocado? ¿Los lectores del Evangelio están siendo engañados? ¿O podemos ofrecer una mejor respuesta a esta aparente inconsistencia?
Lejos de ser bíblicamente ignorante o voluntariamente mentiroso, Mateo se refiere a Jesús como a un «nazareno» para hacer una alusión griega a una palabra hebrea que se encuentra en los profetas. Específicamente, Isaías habla de una figura real que emerge de la línea de David: «Entonces un retoño brotará del tronco de Isaí, y un vástago dará fruto de sus raíces. Y reposará sobre Él el Espíritu del Señor» (Isaías 11:1-2). La palabra que Isaías usa para «vástago» es (נצר; nétser), una metáfora agrícola que, en los días de Mateo, fue entendida como una referencia al Mesías venidero (consultar Rollos del Mar Muerto 4Q161; 4Q285).
Las palabras «Nazaret» y «nazareno» están relacionadas fonéticamente, es decir, tienen un sonido similar al término «vástago» (נצר; nétser) de Isaías. En el griego del Primer Evangelio, «Nazaret» (Ναζαρέτ) se pronuncia Natsaret. Mateo hace un juego de palabras entre «Nazaret» (natsaret) y «nétser» para equiparar a Jesús el «nazareno» con la «rama» mesiánica de Isaías. Al vivir en Nazaret, Jesús pasa sus años formativos en lo que podríamos llamar «Netserlandia» o «Villa del vástago». Por lo tanto, aunque la frase «será llamado nazareno”» no aparece explícitamente en las Escrituras de Israel, Mateo se refiere a la ciudad natal de Jesús para establecer una conexión ingeniosamente interlingüística entre su Mesías y el «vástago» de la profecía de Isaías.
You can learn more profound insights (CLICK HERE for more)